Cuando decides renovar tu espacio, surge una pregunta clave: ¿conviene realizar una reforma integral o mejor optar por un lavado de cara? Ambas alternativas ofrecen beneficios únicos y la elección dependerá de tus metas, presupuesto y el estado de tu espacio. En este artículo, desde Estudiose, te ayudamos a entender las principales diferencias entre ambas opciones y te orientamos sobre cuál puede ajustarse mejor a tus necesidades.
Reforma Integral: Un Cambio Completo
Optar por una reforma integral significa un proceso de renovación completo de una vivienda o local, que puede incluir cambios en la distribución, renovación de instalaciones, sustitución de revestimientos y acabados, entre otros. Aquí te contamos algunos de los principales beneficios de esta opción:
Cambio de estilo: Una reforma integral permite un cambio radical que deja atrás diseños anticuados y trae un nuevo estilo que se adapta a tus gustos.
Confort + Sostenibilidad = Ahorro: Una reforma integral es una excelente oportunidad para aumentar la eficiencia energética mediante mejoras de aislamiento en la envolvente, así como el aprovechamiento de renovables para la producción de energía. Estas mejoras hacen tu espacio más acogedor y sostenible, reduciendo además tus gastos mensuales.
Aumento del Valor del Inmueble: Este tipo de renovación suele añadir un valor significativo a la propiedad, algo especialmente útil si piensas en una posible venta o futuro alquiler.
Salud y funcionalidad. También te permite renovar las instalaciones de agua, electricidad o climatización entre otras, que la convertirán en un espacio más funcional y saludable para ti y los tuyos.
Las reformas integrales suelen necesitar más tiempo, presupuesto y la colaboración de varios especialistas, pero al final todo merece la pena. En Estudiose nos encargamos de hacer todo más fácil para que puedas ver tu sueño hecho realidad.
A continuación te mostramos el ANTES y el DESPUÉS de Biquiño, un proyecto de reforma integral que llevamos a cabo recientemente.
ESTADO PREVIO
ESTADO REFORMADO
Lavado de Cara: Renovación Parcial
Un "lavado de cara" de una vivienda consiste principalmente en mejoras estéticas, como el cambio de acabados, carpinterías, actualización de cocina y baño, reparación de pequeños desperfectos, pintura y renovación de mobiliario y decoración. Aquí te contamos algunas de las principales ventajas de esta opción:
Ahorro en Costes: Este tipo de reforma suele ser más accesible, lo cual la hace atractiva para quienes manejan un presupuesto más limitado.
Menor Disrupción: Las reformas parciales permiten, en algunos casos, seguir utilizando el espacio mientras se realizan las intervenciones, ya que las actuaciones son menos invasivas y duran menos que una reforma integral.
Incremento en el valor de la propiedad: Aunque no es una reforma integral, un lavado de cara mejora la apariencia general de la propiedad, lo que puede aumentar sus posibilidades de venta o alquiler.
Este enfoque no está pensado para quienes buscan cambios significativos en la distribución o funcionamiento de su vivienda o negocio. Además, aunque mejora la apariencia de las áreas renovadas, el valor añadido a la propiedad es menor en comparación con una reforma integral.
A pesar de estas limitaciones, si te decides por esta opción, en Estudiose nos encargamos de sacar el máximo provecho a tu presupuesto, logrando un diseño y acabado final que te sorprenda.
Al igual que con reforma integral te mostramos a continuación el ANTES y el DESPUÉS de Hokkaido Ramen, un proyecto donde el lavado de cara cambió completamente la imagen del restaurante.
ESTADO PREVIO
ESTADO REFORMADO
¿Cuál Opción Elegir?
Como hemos analizado, aunque implique un mayor presupuesto y una mayor complejidad en su proceso, la Reforma Integral es la mejor opción cuando se busca una renovación completa o casi total, tanto en estilo y distribución, como en funcionalidad e innovación. Esta opción es ideal para quienes desean una intervención que mejore su hogar de forma significativa, así como para empresarios o autónomos que quieran emprender o relanzar su negocio.
Aunque no se hacen cambios drásticos en la distribución o funcionamiento, el Lavado de Cara mejora notablemente la experiencia en cualquier espacio, mediante la estimulación de los sentidos y optimizando el uso al que está destinado. En el caso de un negocio, aumentará la satisfacción de los clientes con una inversión económica más asequible.
¡Sea cual sea tu elección, en Estudiose te ayudaremos a tener éxito en tu proyecto, ya sea tu hogar o negocio, reflejando así tu estilo y necesidades!
